sábado, 26 de enero de 2013

Matrioskas

El amor es una caja dentro de otra caja dentro de otra caja, como las matrioskas. Las historias siempre son diferentes, con cada una de las personas que te tocan (mitad por elección, mitad en suerte) la historia es un mundo inolvidable. Hace un mes mas o menos que vivo con Marquitos, nos vamos conociendo. Y hoy es la primera vez que no estamos juntos en el departamento, que sale solo por Luján. Siento que de alguna manera lo estoy empezando a dejar libre, a que él también haga sus lazos en esta ciudad, que conozca gente, que empiece a caminar por Alvear sabiendo que es Alvear y que pueda volver por Rawson hasta el departamento. Pero también tuve miedo a que se pierda, a que no encuentre las calles hasta la plaza Colón. Cuando, por un descuido mio, fui a la plaza a llevarle las llaves que se había olvidado, me di cuenta de que estaba feliz. Corría con la bicicleta en las manos con una sonrisa de oreja a oreja.No todos los amores son iguales. El cariño de Marquitos es tan diferente al cariño de mis anteriores, como todo ¿no? Uno nunca sabe las vueltas que puede dar la vida y cuando uno mas dice "nunca más me voy a enamorar" aparece alguien, otra caja, otra historia, otro mundo inolvidable.

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